Publicidad

Fin a la pax narca; el rechazo la amnistía presidencial

Publicidad
Publicidad

Alexia Barrios G.

@alexiabarriosg

“Ya no hay guerra contra el narcotráfico”, dijo el primer día de febrero del año en curso, de manera contundente, el primer mandatario de la nación. Y algo comenzó a cambiar en algunos puntos del país.

Células del CJNG en la tierra caliente de Michoacán y Guerrero, previo a la visita presidencial de principios del mismo mes de febrero, repartieron volantes y cartulinas en las que el delincuente “José Pineda” o “Rodolfo Maldonado Bustos”, anunciaba el fin de las extorsiones y secuestros, y la amenaza de ejecutar a roba niños, violadores y quienes robaran ganado. Curiosamente, políticos vinculados a esta organización en Pungarabato, Coyuca de Catalán y Tlalchapa, en Guerrero, así como de Huetamo y San Lucas en Michoacán, estuvieron de plácemes con la visita presidencial, departiendo con los funcionarios federales y estatales, tomándose selfies y promoviéndose en sus redes sociales.

Algunos mensajes similares del CJNG se han dejado sentir en otras zonas de Guerrero, de Puebla, Oaxaca, Tlaxcala, Estado de México, Jalisco y, por supuesto, Veracruz y la Ciudad de México. En videos, mantas, cartulinas y cadáveres de ejecutados por ellos han refrendado el mensaje de que no permitirían más delitos que afectan a la población común. Con excepciones y agentes sueltos, en algunos lados se han dado a la tarea los presuntos comandos del CJNG de “limpiar” las calles de las lacras de extorsionadores, ladrones y violadores. Pero no duró tanto, porque han vuelto a las andadas.

Posteriormente. Presuntos mensajes de “la vieja escuela” de Ismael “El Mayo” Zambada fueron puestos en Jalisco, Michoacán, Sonora, San Luis Potosí, Baja California, Veracruz y esta semana, en Naucalpan, Estado de México, los cuales tienen más contenido político que delincuencial y que han levantado la sospecha de que se trata más de una estrategia de contra campaña para vincular al actual gobierno con este grupo delictivo.

Como lo apuntan dos de los mejores columnistas expertos en seguridad, Héctor de Mauleón y Raymundo Riva Palacio, estos mensajes de presuntos grupos del Mayo y del CJNG parecieran crear la atmósfera de que hay un pacto para que se reestablezca la pax narca del viejo régimen (previo a la guerra desatada por Felipe Calderón) y que sea un solo cártel el que predomine

Lo anterior tendría sentido si el país registrara una tendencia a la baja en los índices delictivos de homicidios dolosos, secuestros, extorsiones y robos en todas sus modalidades. Pero no es así.

El primer trimestre de 2019 tiene los índices de violencia más altos en la historia moderna, disparando las cifras de homicidios en todo el país con 8,713 casos, en su mayoría de casos ligados al narcotráfico. Las entidades donde hay más ejecuciones destacan por las disputas entre las pandillas de los cárteles de la droga y las resistencias de las bandas dedicadas al robo de combustibles.

Pero lo más significativo es que, en los últimos 20 días, las entidades gobernadas y controladas por MORENA, el partido del titular del Ejecutivo federal, son las que más están resintiendo los golpes de los cárteles: Yautepec y Cuautla, en Morelos, crímenes a los que deben sumarse el del activista Samir Flores; Minatitlán, Mixtla de Altamirano y Coatzacoalcos, en Veracruz, al que debe sumarse el asesinato del activista Abiram Hernández; de Comalcalco y Huimanguillo, en Tabasco. A ellos, los crímenes desatados en la CDMX por las guerras de narcomenudistas en las alcaldías gobernadas por el partido de Claudia Sheinbaum.

En su conjunto, más allá de quiénes sean los autores de los crímenes y las locas especulaciones de que haya una “mente perversa”, conservadora y neoliberal, que prendiera “tumbar” al presidente con el incremento de la narcoviolencia y el desencanto ciudadano, lo único concreto es que los cárteles de la droga están diciéndole NO a la amnistía, NO a la pax narca, NO al diálogo, NO a la paz y reconciliación. No a nada de lo que les ofrezca. NO DEFINITIVO a una “pax narca” y a la oferta de dejarlos trabajar a cambio de paz en las calles, pueblos y colonias del país.

Tal vez no han digerido este mensaje, porque la toxicidad de las redes sociales y las polémicas del “diálogo abierto” de las mañaneras difuminan todo análisis de temas prioritarios, pero están ahí las evidencias. Los jefes del narcotráfico les vale una y dos con sal la oferta del “perdón y olvido”, de amnistía o indulto, o como quiera llamarle la Presidencia de la República. No es no, simplemente para ellos.

¿Qué está haciendo el gobierno federal ante ello? Hasta ahora, este escenario sólo justifica que la Guardia Nacional tiene que entrar con fuerza y decisión, que sus elementos deberán ser tan capacitados y tan fuertes igual o más que las fuerzas armadas (Ejército y Marina), y con un aparato de inteligencia tan experto y tan fino en el análisis más o mejor que la CIA, el FBI y la DEA juntos.

Esa es la única salida que hasta ahora tiene el gobierno. ¿lo están haciendo? Dudo, porque hasta ahora están apostando por la fuerza de tarea y no por la inteligencia, a la que al contrario, están desmantelando como en su momento hicieran en el foxismo, cometiendo el primer gran error de su sexenio en esa materia.

Publicidad
Publicidad
Entradas recientes

Esta web usa cookies.

Leer mas.
Publicidad