¿Se hará valer la ley o la figura del presidente pesará tanto que será justificada la liberación de un presunto narcotraficante?
Durante la conferencia matutina de este viernes, el presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que sí sabía del operativo en contra de Ovidio Guzmán, hijo del narco Joaquín “El Chapo” Guzmán, y que fue su decisión dejarlo libre luego de su aprehensión.
Pero dicha orden podría meter al tabasqueño en problemas judiciales, o tendría si se respeta lo estipulado en la ley, pues en el artículo 150 del Código Penal Federal se detalla que “se aplicarán de seis meses a nueve años de prisión a quien favoreciere la evasión de algún detenido, procesado o condenado”.
Situación muy parecida a la que sucedió el año pasado cuando el famoso “Chapito” habría sido ubicado y aprehendido en su natal Sinaloa y ocho horas después fue de nueva cuenta puesto en libertad por orden del titular del Ejecutivo.
¿Será que podremos ver al presidente enjuiciado y encarcelado por dejar libre a un narco en la mira de autoridades nacionales e internacionales o justificará de nueva cuenta su decisión?